lunes, 28 de marzo de 2011

ALBERTO ZORZI



BREVES REFLEXIONES SOBRE LA JOYA DE ARTISTA EN ITALIA, DESDE 1945 HASTA HOY

Agradezco muy especialmente a la Universidad de Bellas Artes de Bilbao y en particular a la Profesora Maria Jesus Cueto que ha favorecido que sea posible este momento de confrontación y de conocimiento de la actividad didáctica que desarrollan en el arte, nuestras distintas Instituciones Culturales, Tengo pensado introducir unas reflexiones, unas problematicas que del interior de un razonamiento y de un analisis más general sobre la joya, sobre el adorno que siempre ha involucrado e interesado a los artistas y de manera particular a los escultores y a los pintores italianios contemporáneos.
Hay que decir que también los arquitectos de mi país han mirado a menudo en su propia atención proyectual a la orfebrería, con algunas intervenciones interesantes que os expondré de manera precisa.
Ciertamente la relación será sintética y tomará en examen solo algunos momentos y situaciones que han sido extremamente interesantes por la originalidad de las propuestas y por la fuerte caracterización e innovación que han evidenciado en el ámbito de la orfebrería y de la joya contemporánea.
Un objeto de joyería, que presentaba una ideación imaginativa de forma como obra -única, en definitiva una obra de arte.
Después de 1945, alrededor de los años 50, en Roma, un joyero de amplia tradicción: Mario Masenza decide activar una estrecha colaboración con algunos de los mejores artistas del momento: Afro, Mirko e Dino Basaldella, Canilla, Fazzini, Guttuso, Guerrini, Leoncillo etc.
En 1949 entra en juego además de Roma, la ciudad de Milán y sobre todo la Galería “ll Milione”, importante y famoso lugar expositivo para el arte de vanguardia, así que Masenza tiene la brillante idea (en colaboración con la Galería de arte del Zodiaco de Roma) de llevar en exposición las joyas realizadas por él mismo, siguiendo meticulosamente el proyecto de los artistas, respetando toda su poética de diseño.
Mario Valsecchi, critico del arte milanés, decidió presentar al público estas extraordinarias joyas.
En los trabajos de orfebrería del pintor Afro es evidente una elevada sensibilidad en el tratamiento del metal precioso con signos, con el arte del cincelado, (signos) en relieve obteniddo a traves del cincél.
Notable es la capacidad de Afro en aprovechar de primera persona una técnica de antigua tradición extremadamente compleja, que se determina con el empleo de (atrezzi) herramientas específicas: los cinceles.
La ejecución de la joya, su elaboración puede producirse solamente cuando la plancha metálica de oro está fijada sobre pez, desde este punto con diversas tipologías y formas distintas de cinceles (instrumentos realizados a medida de hierro o acero) se reproduce el dibujo que se pretende conseguir.
La utilización del color obtenida por Afro se basa a través de una presencia amplia de piedras preciosas de corte tradicional (brillantes redondos, rubís y zafiros de corte carrè), per venian colocadas en la obra de orfebrería con extrema y refinada pericia y con un justo equilibrio estético entre cantidad de metal precioso y un número de gemas incrustadas.
En 1956 en la Bienal Internacional de Arte Visiva de Venezia se muestra particularmente atención a la joya de artista y en una sala personal invita a los hermanos Arnaldo e Giò Pomodoro a exponer adornos aureos, relieves, objetos, mientras otro escultor también de origen marchigiana Edgardo Mannucci es llamado a presentar su interpretación de la medalla.
Mario Valsecchi en calidad de comisario pasó a la atención internacional de esta forma con la intervención con los artistias de adornamento personal.
En 1957 a la Trienal de Milán sucedió otra fundamental etapa de este recorrido, con una muestra comisariada por los hermanos Pomodoro sobre la manufactura de los metales preciosos, vienen invitadas muchas personalidad de relieve: E. Sottsass, G. Dova, E. Baj, E. Scanavino, B. Martinazzi .etc.
Arnaldo e Giò Pomodoro conocidos en todo el mundo no solamente por el arte, siempre han declarado que su relacción con la orfebrería siempre ha sido indisoluble.
Su increible aventura creativa y profesional ha nacido por el trabajo sobre la joya, que ha continuado con fuerza también después de su llegada a Milán en 1954 y ha proseguido, con fases también de discontinuidad, evidentemente por su mayor, diría total oficio en la escultura de media y grandes dimensiones, hasta nuestros días.
A través de la técnica de la fusión de hueso de sepia prefentemente, con formas de cincelado extremadamente personales de la lámina y del hilo de oro, que inmediatamente daban el signo y la fuerza a su imaginario orfebre, han innovado decididamente el lenguaje expresivo de la joya.
El color se había aplicado sobre todo por el tipo de tratamento efectuado sobre las superficies de la materia, además determinando distintas uniones de oro rojo, amarillo y blanco (metales empleados preferentemente) se acentúa el aspecto cromático, de la “piel” de oro.
Naturalmente también las gemas entran en relación con la obra, pero como una presencia a veces discreta, en otros casos entendida como “masa” de luz y color sea con el uso de brilantes, rubíes, zafiros y esmeraldas, y con la introducción de fuerte evidencia de piedras semi-preciosas: turquesas, lapislázulis, coral y cuarzos.
En 1966-67 siempre en Milan Giancarlo Montebello e Teresa Pomodoro formaron la empresa Gem Montebello con la intención, en calidad de editores, de realizar unas magnificas joyas pensadas por los más representativos artistas del periodo, presentes sobre la escena de Italia pero también en Europa y en USA.
La intención era de acercar el público a los grandes nombres del arte, con un inversión económica reducida, adquiriendo no obras únicas, sino una edición limitada de múltiples.
El trabajo desarrollado junto con Lucio Fontana, por ejemplo, es extraordinario por la invención creativa, por su visión y proyeción prospectica en el tiempo, en la distancia.
En efecto, ha sido ideada en el “lejano” 1967, la serie de los brazaletes de grandes dimensiones de forma oval y elíptica con los típicos cortes de Fontana, realizados en plata y lacas-esmaltes industriales por el color azul, y negro con blancas líneas.
Estos adornos femeninos son premonitores de tantas formas actuales de operatividad de los artistas o de los diseñadores más profesionales en relación con el objeto joya.
La referenencia ha sido muy amplia y problematica inherente, la utiliza con materiales alternativos o asi dicho “pobres” de la orfebrería de investigación de vanguardia. Y es en parte, un aspecto que viene confrontado en este último decenio, también en el ámbito del amplio sector del artesanado y de la industria de orfebrería italiana.
En Fontana, también en las obras obtenidas exclusivamente de la materia preciosa, él obra una búsqueda como intervención madurada yà en el 1962, o bien elimina, quita la gema de la lámina e introduce un lenguaje aúreo.
La joya debía ser pura presencia de oro amarillo, (título 750 y a menudo también de título 999,9) la materia en su total pureza debía exprimirse completamente.
Sus signos hablan de la máxima claridad formal y de contenido, sin “caídas” en embellecimientos para Él considerados completamente inútiles.
Giuseppe Capogrossi en vez, entre 1970-1975, interpreta el típico módulo que utilizaba en la pintura, una especie de grande peine, como espacio bidimensional completamente encrustado de brillantes.
Determinaba una sintesis extremadamente eficaz, jugada sobre una contraposición colorista límpia entre láminas de oro completamente recubiertas de brillantes y sobre el mismo plano intervenía con onix negro o coral rojo, a veces puesto lateralmente o sobre puesto, o bien en otras soluciones colocaba la piedra dura y semipreciosa externamente al estiramiento reluciente de los brillantes blancos incrustados a la manera de taracea.
Obras de alta joyería, felizmente realizadas y comercializadas por los Hnos Fumanti de Roma que emprendieron en aquellos años una colaboración también con otros artistas como: Franchina, Canilla, Mastroianni, Consagra, Ceroli, Uncini , Marotta etc.
Recientemente, después del 2000, en Roma en la Galería de Arte Editalia que se dedica en general a la pintura y a la escultura contemporánea, ha decidido considerar como obras de arte las joyas de autor, y ha emprendido con prudencia un recorrido de colaboración con los escultores Consagra y Mannucci y la conocida pintora Carla Accardi.
Trabajando con el mismo entendimiento que tenía Mario Masenza en los años ’50, es decir llevar a la joyería las ideas innovadoras de los artistas, por lo que se refiere al concepto de proyecto y de la manera así como utilizar y reinventar las técnicas de la tradicional orfebrería. Pietro Consagra, escultor de fama internacional recientemente fallecido, trabajò por distintos continentes: desde la Gem Montebello de Milán, al joyero Masenza y con los hermanos Fumanti de Roma, también con la Fundación Sartirana Arte de Pavia y últimamente con la joyería Petochi de Roma; coherentemente con su oficio de escultor, trasladó a la joya, llevando los justos equilibrios y medidas, su intención es trabajar sobre la bidimensionalidad, sobre la frontalidad. Joyas resueltas a veces con flores evidentes y de amplio respiro creando amplios vacíos en la materia preciosa. En otras propuestas, en vez, la acción era más rebuscada, presentando líneas y signos obtenidos con trazo extremadamente sútiles y contínuos, con alguna fisura que se mueve a leves desplazamientos de los planos de las superficies aúreas. Consagra ha empleado indistintamente brillantes, piedras dure y semi-preciosas y esmaltes con fuego, o bien esmaltes sintéticos de oro amarillo, nunca ha limitado las búsquedas de materiales con distinciones limpias, como a su vez otros artistas han hecho.
Giuseppe Uncini es un escultor que ha alcanzado un alta consideración sea en campo nacional como internacional, que siempre ha pensado y realizado joyas desde el comienzo de su carrera profesional, su primer trabajo de orfebrería es de 1958. Desde 1960 emprende una intensa colaboración con la joyería de Mario Masenza que durará hasta el final de los años ’80. El procedimiento que caracteriza por lo genera las solucciones y las propuestas es la fusión a cera perdida, una técnica que se determina partiendo por un prototipo en cera, que Uncini realizaba con esmero y meticulosidad casi maniacal, para luego consignarlo al orfebre para su realización. Coherentemente con su recorrido plástico, traduce en la joya la misma libertad creativa empleada en la escultura su lenguaje costructivo, estructural y bruto, ciertamente no decorativo. Recuerdo la prolífica estación de los años ’60 con las notas “Cementiarmati” y “Ferrocementi” y con la sucesiva secuencia de las “Dimore” e “Muri d’ombra” de los años ’80, donde la joya paralelamente a la escultura se hace un obra constituida por materiales jamás empleados antes para el adorno y la orfebrería como el cemento (hormigón) combinado con la materia preciosa.
El oro que reproduce detalles arquitectóncos: particulares de ladrillos, muros; la plata bruñida (coloración gris-negra) que imita el hierro, la plata satinada, con pequeños grumos y signos que parece hormigón retenido.
En los años más recientes con las obras escultóricas de la serie “Espacios de hierro” y “Desplaza hormigón”, que tienen un respectivo en orfebrería con obras ornamentales que mantienen el emplante constructivo compuesto, extremadamente matérico típico de Uncini, pero ven también el aparecer de brillantes, de gema preciosa por excelencia.
Y Uncini dice: “… los diamantes son los que no están allí para enriquecer o embellecer, sino están para ser pequeños golpes de luz, leves destellos. Para conseguir con discreción el trabajo lo más liviano posible y cercano a la naturaleza de la joya”.
En el 2002 la galería de arte contemporáneo Fumagalli de Bergamo, expone en una personal de Uncini (del título indicativo “A Cera Persa”- A cera pérdida) dedicada exclusivamente a su nueva producción aúrea.
La muestra está articulada sobre dos tipologías di adornos femeninos: por un lado brazaletes de grandes dimensiones, por otro la presencia de diversos collares con pendientes que evidencian una precisa y clara construcción, definida por fuertes contrastes entre oro satinado, plata y plata bruñida.
Vienen inseridos con particular atención numerosos brillantes, extendidos sobre un plano metálico, en un orden que de propósito no respeta la tradición. Solución feliz que determina un eficaz e interesante equilibrio compositivo de todo el conjunto de la obra.
El arquitecto Ettore Sottsass figura paradigmática de la cultura del proyecto, representante internacionalmente reconocido del Design “ Made in Italy ”, desde sempre se ha ocupado del mundo de las joyas. En el interior de una carrera profesional exaltante, que tiene desplazado en cada lugar y también en el mundo de la proyectación, ha habido un momento de vuelta de tuerca y por lo que se refiere a la producción de la joya, y ha sucedido precisamente cuando ha empezado la colaboración con Cleto Munari, el editor de joyas y de objetos de plateria para la casa, ideadas por las mayores figuras de relieve de la arquitectura y del diseño nacional e internacional.
Desde aquel momento en los comienzos de los años ’80, y sobretodo después de la consistente colección preparada sobre comisión por Cleto Munari entre 1984-’86, se puede afirmar con certeza que el conocimiento de la proyectación de la joya y de los resultados concretos que Sottsass conducia por diversos años, sea haya llegado también al gran público. Su trabajo consiste como él mismo afirma: “…en la reproducción más o menos de lo que pienso se puede hacer mucho en arquitectura, ejercicios formales de composición arquitectónica “.
Joyas de dimensiones notables, con un amplio uso del oro amarillo brillante como un espejo en el cual emergen unos sólidos geométricos (cubos, cilindros etc.) de metal precioso, acostados a numerosas gemas semi-preciosas y a piedras duras: agatas, corales, cuarzos, lapislázulis, onix etc. igualmente con carácter geométrico.
En distintos casos, me refiero a la maravillosa coleción de anillos donde también los brillantes aparecen en toda su brillatez, dispuestos sobre planos aúroe, geométricamente inseridos en la estructura compositiva.
Equilibrios y desequilibrios de las formas, típica acción creativa y proyectual de Sottsass que se hace muy interesante y fascinadora también en el microcosmos ornamental que él dedica a la mujer.
Y así tenemos por fin unos breves signos sintéticos de mi trabajo, que se determina directamente por una exclusiva proyectualidad y creatividad en el campo de la joya, desde la segunda mitad de los años ’70.
Escultor en la joya, persiguiendo esta práctica sobre todo por una reflexión sobre el microcósmos del adorno.
Como lucidamente me define Enrico Crispolti: “.. Su trabajo de “artista-orfebre” (en el sentido de ser, originariamente, un escultor todavía enteramente y no solamente ocasionalmente en el tiempo dedicádose en el ámbito de la orfebrería). Un escultor que tiene en efecto convertida la propia vocación de inventiva plástica dentro de la dimensión de la joya ..” (4).
En definitiva el desafio, la búsquedaa que desarrollo se extiende en crear unas obras de arte de pequeñas dimensiones, que presento, independientemente por sus medidas, proporciones y funcionalidad de los contenidos poéticos, y de las caracteristicas estéticas tales por afirmar que no somos más en el campo de las artes aplicadas o menores, pero entramos de lleno, título en el interior del mundo del arte así dicho.
“ Obra Abierta” es el repertorio de joyas que hacia la mitad de los años ’80 hasta hoy conduje con energia y notable empeño. Es un trabajo donde se califica una fuerte tridimensionalidad, los volumenes plasticos aúreos, dialogan con las gemas de color semi-preciosas colocadas en el interior de la obra como partes integrantes de todo el conjunto.
La búsqueda de cromatismo y volumen de las gemas, es un proceso creativo-proyectual que nace junto a la idea general retenida, a través de una rigurosa selección, justa, ”perfecta” para dar a la forma del oro, empleado sea en lámina que en hilo.
Equilibrio y armonia que se confrontan con fuerzas dinámicas de movimiento en su interior.
Lo lleno y el vacío, las descomposiciónes y las fracturas que se recomponen en una tensión constructiva que encierra y resuelve en una estructura formal definitiva la inter-reacción de estas fuerzas. Recientemente, a partir de 1995, con las obras del ciclo “La Ciudad”, busco de exprimir mi sensación y emoción que vivo y siento en el contexto architettonico, en el interior de la dimensión metropolitana, de la ciudad vivida cotidianamente. joyas que en este caso se expresan como materia metálica viva, vibrante, oro amarillo y blanco, platino, plata; con la exclusión para las gemas, pero con el aparecer a veces de esmalte a gran fuego extendido a 820 grados en algunos puntos prestablecidos.
En las recientes exposiciónes, la antológica al Museo de los Argenti de Palacio Pitti en Florencia del otoño de 2009, se recoge más de una trentina de trabajos. Mientras en la muestra que he terminado desde poco más de dos meses para el Museo di Palazzo Fortuny de Venecia, he expuesto las obras de la última decada, desde el 2000 hasta el 2010, y hay que señalar la introdución preponderante del color, el cromatismo está determinado en muchas formas, modos y materiales distintos del esmalte a gran fuego, a las piedras de color semi-preciosas, a la pintura al óleo.
Es interesante como el aspecto cromático ha sido resuelto en distintas obras-joyas a través la intervención del color al óleo. Precisamente esta voluntad de llevar un instrumento como el color al óleo en la dimensión del metal, en la composición de estas joyas, que son sustancialmente las micro-esculturas que hay llevar, eso significa que la pintura y la escultura pueden convivir en el interior de la construcción de la joya de artista, como obra única e irrepetible.
Para concluir un brevisimo gesto en el curso de orfebrería que desde más de doce años he desarrollado al interior de la Accademia di Belle Arti di Ravenna.
A partir de 1970 un escultor que precedentemente he indicado, Giò Pomodoro, había experimentado no obstante las grandes dificultades de orden burocratico, un curso de orfebrería y di micro-fusión para la escultura en el interior de la Accademia de Bellas Artes de Ravenna.
Esta fuerte voluntad que el artista G.Pomodoro tubo en introducir en el adorno de los estudios académicos italianos, una disciplina de estudio como la orfebrería fue indispensable para posteriores desarrollos que este curso tubo después.
Ciertamente la Accademia de Ravenna, siendo también la única Institución Pública de Italia que tiene y mantiene el curso de orfebreria con estas características didácticas dirigidas y puestas en relación al arte moderno y contemporaneo, se distingue per la originalidad y la especificidad de la propia dirección de estudios.
Además en años recientes hemos introducido en el estudio de la joya la posibilidad a través del micro-mosáico hilado para realizar la orfebrería de arte sostenida también por elementos de carácter museístico.

Nuestro desafio cultural como de Institución Académica es conseguir en atar una historia y una tradición milenaría como el mosáico en otro suceso que empieza desde el origen del hombre, desde la antigüedad como la joya y el adorno personal, pero considerados bajo una óptica, un aproximarse, una visión que sea conscientemente al interior de la realidad contemporánea.
Crear una forma de arte que sea dentro la propia historia del hombre y de la mujer, pero que se proyecte en el tercer milenio, sobre el futuro, analizando y estudiando los recorridos y los einguajes del arte de nuestro tiempo, del espíritu del tiempo que vivimos.

Profesor Alberto Zorzi
Accademia di Belle Arti di Ravenna.


Bibliografia:

Enrico Crispolti : “El’oro de la búsquedaa plástica “, Edizioni Mazzotta, Milano, 1985.
Barbara Radice: “Joyas de Arquiitectos”, Edizioni Electa, Milano 1987
C.Cerritelli, L.Somaini: “Joyas de Artista en Italia 1945-1995” Electa Editori Associati1995,Milano.
Enzo Biffi Gentili: “Cleto Munari Dandy Design”, Edizioni Electa, Napoli 1997.
E. Arslan, A.Quattordio, P:Venturelli, C.Weber-Stober, L.Vinca-Masini: “Alberto Zorzi”, Corraini Editore, Mantova 1999.
Enrico Crispolti:” Imaginación Aurea “, Silvana Editoriale, Milano 2001
AA.VV. a cura di Marilena Mosco: “El Arte de la Joya y de la Joya de Artista del ‘900 hasta hoy”. Giunti Editore, 2001, Firenze.
Ada Masoero: “ Pensar con las manos -Uncini a Cera Persa”, Edizioni Galleria Fumagalli, Bergamo, 2001
Enrico Crispolti: “ Escultureas preciosas Zorzi oggi”: Edizioni Il Ponte, Firenze, 2005.
Gillo Dorfless, Giuliano Centrodi: Oro de Autor”, Edito dal Museo Nazionale d’Arte della Cina, Pechino, 2006.
C. Acidini, O.Casazza, E.Crispolti, A.Paolucci: “ Zorzi –Joyasi, ,Disegni 1973 – 2009
Jewelry, Silver, Drawings “. Editore Sillabe, Livorno 2009.
E.Crispolti, D.Ferretti, G.Romanelli : “ Zorzi – Unicum – Gioielli e Argenti 2000 -2010”.
Allemandi Editore, Torino 2010.

No hay comentarios: